El avance del World Energy Transitions Outlook esboza una vía para que el mundo alcance los objetivos del Acuerdo de París y detenga el ritmo del cambio climático transformando el panorama energético mundial. Este avance presenta opciones para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C y acercar las emisiones de CO2 a un nivel cero a mediados de siglo, ofreciendo una visión de alto nivel sobre las opciones tecnológicas, las necesidades de inversión y los contextos socioeconómicos para lograr un futuro energético sostenible, resistente e inclusivo.
Cumplir los objetivos de reducción de CO2 para 2050 requerirá una combinación de: tecnología e innovación para avanzar en la transición energética y mejorar la gestión del carbono; políticas de apoyo y proactivas; creación de empleo y mejoras socioeconómicas asociadas; y cooperación internacional para garantizar la disponibilidad y el acceso a la energía.
Entre las principales conclusiones:
Las tecnologías probadas para un sistema de energía neta cero ya existen en gran medida en la actualidad. La energía renovable, el hidrógeno verde y la bioenergía moderna dominarán el mundo de la energía del futuro.
Se necesita una combinación de tecnologías para mantenernos en la senda climática de 1,5°C. Estas tecnologías incluyen una producción de energía cada vez más eficiente para garantizar el crecimiento económico; sistemas de energía descarbonizados dominados por las energías renovables; un mayor uso de la electricidad en los edificios, la industria y el transporte para apoyar la descarbonización; una mayor producción y uso de hidrógeno verde, combustibles sintéticos y materias primas; y un uso específico de la biomasa de origen sostenible.
En previsión de la transición energética que se avecina, los mercados financieros y los inversores ya están desviando el capital de los combustibles fósiles hacia otras tecnologías energéticas, incluidas las renovables.
La inversión en la transición energética tendrá que aumentar un 30% con respecto a la inversión prevista, hasta alcanzar un total de 131 billones de dólares de aquí a 2050, lo que corresponde a una media de 4,4 billones de dólares al año.
Las políticas sociales y económicas nacionales desempeñarán un papel fundamental a la hora de llevar a cabo la transición energética a la velocidad necesaria para restringir el calentamiento global a 1,5 °C.
Este avance identifica oportunidades para apoyar la toma de decisiones y políticas informadas para establecer un nuevo sistema energético mundial. Tras este avance, y en consonancia con el proceso de Diálogo de Alto Nivel de las Naciones Unidas, la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) publicará el informe completo, que ofrecerá una visión global y las medidas políticas correspondientes para la transición.
Fuente: International Renewable Energy Agency: IRENA
¿QUIERES UNIRTE A PROTERMOSOLAR?
Únete a Protermosolar y descubre las ventajas de ser socio
